Enuentros de Meditación

Práctica y experiencia 
de la 

Meditación

Lunes 5, 12, 19 y 26 de Septiembre de 2016
19 a 20.30 hs
San Isidro

No hay meditadores.. Hay meditación… 
Juddi Krishnamurti

Seguiremos profundizando en la Meditación
como una práctica cotidiana de dejarnos habitar por la paz
“el camino hacia el silencio anhelado”
Seguiremos profundizando en la Meditación
como una práctica cotidiana de dejarnos habitar por la paz “el camino hacia el silencio anhelado”.
Somos Seres únicos e irrepetibles, cada uno de nosotros, meditará de acuerdo a su sintonía personal, navegará sus aguas internas y más profundas, en su propio tiempo, sin deseo, ni apego, ni esfuerzo.
 
Basando la vivencia en la respiración, la concentración sin presión, delicada y amable, y la relajación.
Usaremos todas las expresiones del alma disponibles para acceder al estado de meditación suave, lenta, constante, hasta convertirla en un arte.
En los encuentros compartiremos la palabra y el silencio. Ambas hablan por sí mismas, son energía vital y ancestral, tienen voz.

También recurriremos al uso del sonido en todas sus formas, 
y también al movimiento.

Somos Meditación

Alte. Brown 451, San Isidro, entre Chacabuco y 25 de Mayo

Cada encuentro por separado: $ 150.-
Los 4 lunes por mes: $ 500.-

Confirmar Asistencia
Traer ropa cómoda.
Puntualidad.
LLegar 18.45 hs

 
Bendiciones!

Gracias! Añay!
KutiMayu

Que es la Meditación?

El alma que se mueve en el mundo de los sentidos,
y pese a ello,
mantiene en armonía los sentidos...
encuentra el descanso en la quietud..
Bhagavad-guita

Es una práctica diaria, un ejercicio constante que nos vuelve a la Fuente.



Es Paz.

Es el arte de vivir.
Es confiar en uno mismo y en el Todo.

Es la aventura de viajar oceánicamente por nuestros caminos internos, que están repletos de jazmines suaves 
que nos inundan con su aroma..
Es quietud y Es silencio.
Es respiración y Es concentración sin esfuerzo, sin deseo..

Es relajación.

Es intención y abstracción.
Es habitarnos e integrarnos.
Es consciencia en acción.

Es nuestra mirada interior.

Es desapego.

Es plenitud.

Es proceso en sí misma.

Es placer.

Es el despertar a tu consciencia en pleno estado de alegría.

La meditación es festiva.

Es una travesía acuática hacia las profundidades de nuestro Ser.

Es el encuentro con nuestra más pura esencia.

Es ser flor, y morar en el capullo...

Es ser viento, y habitar en su sonido, siendo viento...

Es ser agua, y nadar en el mar profundo, sintiendo ser la suavidad y la fluidez del agua..
Es ser Tierra Pachamama, y convertirse en abundancia...
Es ser Fuego sagrado, y sentir ser el calor de la brasa....

La meditación es simplemente amor.

La meditación es música y canto.

La meditación es danza.

Todos somos meditación cuando entregamos y compartimos nuestro arte.

Es una llave que nos abre los portales del entendimiento.

Es sentirnos y ser libres, eligiendo la libertad de Ser quienes somos originariamente.

Es detener el mundo. 
....

Por medio de la meditación aprendemos a crear un espacio en nuestro interior, que nos induce al estado de placidez.

De manera gradual, desarrollamos la estabilidad mental y el equilibrio interior, para permanecer en armonía.

El propósito de la meditación es pacificar y calmar la mente, naturaleza esencial del Ser, conciencia pura, 
energía de la vida misma.

Cuando nos referimos a la quietud estamos hablando de la mente y no del cuerpo, más allá de que éste se aquiete como consecuencia de lo otro.

La práctica de la meditación es un devenir entre la respiración, la concentración y la relajación.

Respirar como interioridad que nos conecta con el hilo de la vida, fuerza vital de nuestra existencia.

Respirar repetidamente,.. suave, lenta y profundamente induce al aquietamiento de la mente.

Scaneando todo nuestro cuerpo físico, sistema por sistema, órgano por órgano, trascendiendo todos los niveles de nuestra arquitectura sagrada con la respiración, .. respirando.
La concentración como intención directa hacia nuestra esencia natural, contacto divino con nosotros mismos. Con-centrándonos... sin presión.. 
desde el aquietamiento del Ser..
La experiencia de la concentración, colabora en todos los aspectos de la vida. Nos ayuda en la concreción de cualquier tema que desarrollemos. El ejercicio permanente de finalizar todo aquello que emprendemos nos induce al proceso de la concentración.




En la vida espiritual, la concentración sin desvelos juega un papel fundamental en la evolución de nuestro Ser, ya que nos conduce hacia el camino justo del alma.

La concentración es una experiencia maravillosa que nos abre a nuevos portales del entendimiento.

Siendo la respiración, su gran aliada.

Colabora en el aquietamiento de la mente y el espíritu, expande el estado de conciencia, clarifica los pensamientos y activa la focalización y concreción de ideas, proyectos, decisiones de toda índole, desarrolla la voluntad y la paciencia, posibilita mayor rapidez mental e ingenio y capacidad para la definición de trabajos más espinosos, y mayor agudeza y destreza en la vida cotidiana. La concentración coopera eficazmente en el mundo material para la realización y progreso de las acciones que son necesarias para obtener exitosamente un objetivo.

Los meditantes que incorporan, en su vida, la concentración , evolucionan rápidamente y cuentan con una llave maestra para ingresar al universo de la meditación y transitar una vida interior espiritual constante, armónica y sosegada.

La respiración y la concentración nos abren las puertas al estadío de la relajación, que distiende el cuerpo físico e induce a la meditación en forma instantánea. Sentir y pensar en la relajación como proceso de laxitud de todo el cuerpo, en especial de la mente, que se aquieta y se afloja.

Cada una de estas acciones es una práctica independiente y a la vez profundamente interrelacionada, y que en su conjunto nos animan a vivir saludablemente.

La intención es la determinación del Ser de llegar a ser. Es la expresión del deseo del alma de lograr el máximo propósito de estar con nosotros mismos.

Considerar a la meditación como forma de desprogramación de los programas a los que hemos sido inducidos por el sistema, para volver a ser quienes somos originariamente. 


Somos Meditación


Gracias! Añay!
KutiMayu
Cómo practicamos la Meditación

Cada uno de nosotros es una experiencia única e irrepetible.
Almas en tránsito. Partículas sagradas, diseños perfectos, creados a imagen y semejanza del cosmos y de los componentes de su creación, arquitectura en evolución dimensional,
Proporción áurea.
Diferentes en todos los aspectos de nuestra existencia.
Cada Ser encontrará su forma de meditar.
Cada persona descubrirá y realizará la meditación que mejor se armonice con su naturaleza.
Esto significa: hallar la postura que le resulte más cómoda durante la meditación, el tiempo que dure la misma, el lugar más apropiado para la práctica, y la técnica meditativa que se adapte a su Ser.
Una postura recomendable, es:
Sentados, sobre los isquiones, que son los huesos que se encuentran en el medio de cada glúteo y que se perciben al tacto, que caen perpendiculares al suelo, para que la posición de la columna y de todo el cuerpo sea firme y relajado a la vez, y que pierda peso. 


Es interesante, y además necesario, probar diferentes posiciones: sentados sobre almohadones, de diferentes formas y tamaños, y también, experimentar tanto con sillas, como con bancos de madera diseñados para meditación.
El objetivo es comenzar la meditación cuando estamos totalmente cómodos, y no hay molestias de ningún tipo.

Los ojos permanecerán suavemente cerrados, 
y sin ejercer fuerza alguna.
La lengua flotará, el paladar se aflojará, los labios estarán levemente entreabiertos.
El ejercicio constante de estas posturas posibilitará al meditante, acceder al estado de reposo, sosiego y relajación anhelado. En esta posición, se comenzará a respirar 
suave y lentamente.
Somos seres diversos, somos diversidad. 

Nos dejamos poblar por todas las oportunidades que hagan posible cumplir con el objetivo de habitarnos íntimamente para acceder al estado de profunda paz.
Usualmente, en las técnicas tradicionales, el aire es inhalado y exhalado por la nariz.
También existe la opción de inhalar por la nariz y exhalar por la boca a través de los labios, levemente entreabiertos, exhalando en cada respiración todo aquello que no queremos más, que nuestro cuerpo naturalmente exhala.
Sin juzgamiento de ninguna índole, solo respiramos.
Como dice Juddi Krishnamurti, es dejar de ser el meditador, para ser la meditación...


Se comienza concientizando la respiración, haciendo  respiraciones profundas, lentas y conscientes, invitando a nuestra totalidad a participar del viaje espiritual de estar con nosotros mismos. Una vez establecido este contacto, seguimos con la respiración natural, regular y rítmica.
El momento trascendente de la experiencia de la meditación es en donde el observador y lo observado se funden; el experimentador y lo experimentado se vuelven una misma cosa, y se trascienden las dualidades, alcanzando el estado sublime de unión interior. El meditador adquiere una paz y bienestar interior sorprendente y entiende y conoce íntimamente su esencia, máxima riqueza del Ser.
Esta experiencia de vida, espiritual, de Ser quienes somos como núcleo, y reconocernos en ese lugar, lleva tiempo de práctica constante, firme, insistente, obstinado, regular y tenaz, no existen métodos sobrenaturales ni inmediatos.
Es solo anhelo, entrenamiento y trabajo dedicado al autoconocimiento.
Los niños de este Nuevo Tiempo Espacio, comienzan tempranamente a sentir la necesidad de practicar la meditación como forma de trascender su existencia.
Una persona que por medio de la meditación adquiere paz en su vida, encuentra en su interior la paz que necesita. También le permite vivir de forma simple. Su mente se serena creando a su alrededor un clima de sosiego y de armonía, respetando la vida en todas sus formas, tomando contacto con el pulso vital, energía latente de la vida.

Somos Meditación

Bibliografía: 
Jiddu Krishnamurti
Swami Vishnu Devananda

Gracias! Añay!
KutiMayu

Cómo actúa la meditación en nuestro sistema..

La meditación actúa profundamente sobre el sistema nervioso parasimpático disminuyendo el estrés y la tensión nerviosa. El efecto que ejerce el sistema nervioso parasimpático sobre los órganos del cuerpo les devuelve su armonía, relajando el corazón y la presión arterial por medio de la vasodilatación. Las endorfinas que se liberan en el cerebro producen un estado de alegría y paz profundo. Los tejidos y las células se regeneran. Las preocupaciones disminuyen.





Fuente: Asociación Educar - www.asociacioneducar.com
 

En la meditación, 
respiramos natural, regular y rítmicamente.
No hay esfuerzo, solo quietud.
El punto culminante de la experiencia de la meditación es en cuando el meditante y la meditación se vuelven una misma cosa, se funden, y se trascienden las dualidades. El practicante adquiere una paz y bienestar interior sorprendente y conoce de primera mano su esencia más íntima.
Esto lleva tiempo de práctica regular y perseverante, no existen métodos milagrosos ni instantáneos, solo la práctica y el trabajo gradual y perseverante llevan el barco a buen puerto.
Todos estamos invitados a probar y experimentar los beneficios que se derivan de esta práctica tanto para la persona que la realiza como para su entorno y para la comunidad en general, generando un cambio desde nuestro interior.
Cualquier persona sana, o enferma puede obtener beneficios psicofísicos de la práctica de la meditación. Por medio de ella se puede ayudar a eliminar adicciones, ansiedades y miedos.
Una persona que por medio de la meditación adquiere paz en su vida, encuentra el sosiego interior que necesita, y su mente se serena creando a su alrededor un clima de calma y de armonía. Comienza a respetar la vida en todas sus formas, porque ha entrado en contacto con la energía latente de la vida en su interior. La meditación nos pacifica. Nos permite vivir de forma sencilla. Nuestro entorno se equilibra y armoniza.

Somos Meditación

"Sirve, ama, da, purifícate, medita, realízate"
 Swami Vishnu Devananda


Gracias! Añay!
KutiMayu